¿Navidad discriminadora?

¡Hola a todo el mundo!

Sabemos que queda mucho para diciembre, pero estos días estamos reivindicativas (entre el anuncio, esta entrada, y lo que viene después...), y llevamos años pensando en cómo los catálogos de juguetes que salen en las épocas navideñas reproducen la desigualdad. No es algo en lo que se suela fijar mucha gente, porque asumimos como algo natural que las niñas jueguen con Nenucos y los niños con Action Man. Pero, ¿Qué se esconde detrás de estos catálogos aparentemente inocentes?
Así que hoy analizaremos un catálogo de una de las empresas más famosas en nuestro país: El Corte Inglés.

Como todos los años, hay una sección dedicada a todos esos juguetes que están basados en los cuidados (ser mamá o limpiadora), y bien, ¿a quién está dirigida esta sección? Como no podía ser de otra manera, a las niñAs; siempre salen niñas jugando con este tipo de juguetes, lo que perpetúa los roles de género.
Con esta publicidad (porque lo malo es como lo venden, no el producto en sí), se les está enseñando a las niñas que su máxima aspiración en la vida ha de ser la ser madre y vivir por y para sus hijos/as. De esta manera, perpetúan el sistema patriarcal en el que vivimos y se aseguran de que los hombres sigan siendo los que están en el poder.

Seamos criticas, ¿a quién le gustaría jugar a estar cuidando de un muñeco: darle de comer, bañarle...)? A nadie. Pero interiorizamos que es divertido jugar a ser "mamás", mientras que los hombres interiorizan que esta es una tarea de mujeres y que la de ellos es jugar al balón. 

Otra sección que suele generar polémica es la de mecánica y/o ciencia, una sección tradicionalmente dedicada a los niñOs. A pesar de que nuestro catálogo apenas ha fotografiado a criaturas jugando con este tipo de juguetes (puede que para evitar la polémica), se les ha colado un poco de machismo. En la foto que adjuntamos podéis ver como a las chicas se nos vuelve a relevar al cuidado, en este caso de animales. En cambio, ellos juegan con robots "inteligentes". Perpetúan la idea de que nosotras tenemos que cuidar y ellos, investigar.

Ahora bien, ¿Cuál es la sección femenina por excelencia? La de belleza, y en este catálogo no iba a ser menos. Desde todos los sectores de la sociedad, nos envían la idea de que lo único que importa de una mujer es su aspecto: nos venden juguetes para que aprendamos a hacernos la manicura, teñirnos el pelo, maquillarnos, y una largo etcétera para aprender a ponernos guapas. A veces, incluso camuflan este mensaje intentando vendernos la idea de que estamos haciendo ciencia (Laboratorio de Uñas H2O).

Los juguetes de acción y aventuras continúan estando, mayoritariamente, dedicados a los hombres. Parte de esta culpa la tiene Hollywood, quien a través de sus películas nos manda el mensaje de que solo los hombres pueden ser valientes y fuertes. Aunque hay numerosos cómics de heroínas, los únicos que obtienen representación son ellos.

Muchas veces nos da la sensación de que la asociación de niño = azul, niña = rosa ha quedado en el pasado, pero para El Corte Inglés, esta diferenciación sigue vigente.

Lo que más nos ha llamado la atención es el hecho de que tengan una sección titulada "Jugar a ser mayor". En esta sección se encuentran, sobre todo, juguetes tipo cocinitas o supermercado.
No nos parece bien que al anunciar a estos juguetes, se ponga siempre a la mujer como cajera. Además, estamos criando a nuestros hijos e hijas en una sociedad en la que desde pequeños/as les animamos a ser consumidores/as; vivimos en la sociedad del consumo y deberíamos ser un poco más críticos respecto a qué valores reproducen ciertos juegos.

A modo de reflexión, creemos que se debería cambiar inmediatamente los roles de género que persisten a día de hoy en este tipo de catálogos. Un hombre y una mujer pueden realizar (y deben) el mismo tipo de tareas y jugar a los mismo juegos, no se deberían separar el función del género.

La educación es clave en este aspecto, las criaturas (a través de catálogos como estos, la televisión, su propia familia...) están siendo educados en esta división. Debemos, tanto los docentes como las familias, ser conscientes de esto y explicarles cuando veamos este tipo de divisiones que esto no es así, que todos somos iguales y podemos realizar las mismas tareas y oficios (a su vez, debemos dar ejemplo nosotrxs).

A su vez, queremos recalcar la importancia del consumismo de nuevo. Debemos educarles a que compren moderadamente, no lo primero que vean y les guste; tienen que reflexionar si de verdad necesitan o van a usar durante largo tiempo ese objeto. También hay que explicarles de donde vienen los productos que compramos para que vean el gran proceso que se realiza para fabricar ese producto (qué materiales se han utilizado, si se han testado animales o no, si ha habido explotación humana, etc.); de este modo consumirán de una forma responsable (siempre y cuando les demos ejemplo).

Nos parece esencial educarles en la publicidad para que no construyan su imagen y su rol social a través de ella, ya que puede llegar a ser muy perjudicial cuando entren en la etapa de la adolescencia (os recomendamos ver el documental (del que haremos una entrada) de Miss Representation, aparece en la plataforma Netflix). El que empiecen a tener conciencia crítica desde peques, serían un pequeño primer paso hacia la erradicación del sistema patriarcal en el que vivimos. Obviamente, no es la solución definitiva, pero ya les estaríamos educando para dejar de reproducir roles de género y actitudes machistas.

 La función del profesorado y de las familias es que la criatura se pueda ir construyendo a sí mismo por medio de los conocimientos que le transmitimos y por el contexto en el que vive. Por ello, hay que ser crítico con nuestro contexto y advertirles de las cosas perjudiciales que contiene (junto con las buenas); así, comenzarán ellxs poco a poco a ser también críticos y formar su personalidad de la manera más sana posible.

Y vosotrxs, ¿que pensáis?

¡Nos vemos pronto!